A lo largo de su historia, la Orquesta Nacional de Francia ha colaborado con estrellas de la talla de Leonard Bernstein, Pierre Boulez, Riccardo Muti, Seiji Ozawa, Martha Argerich, Vladimir Ashkenazy, Nelson Freire, Yo-Yo Ma, Yehudi Menuhin, Anne-Sophie Mutter, Vlado Perlemuter, Sviatoslav Richter, Mstislav Rostropóvich, Arthur Rubinstein e Isaac Stern. Bajo la batuta de Antal Doráti y con Paul Badura-Skoda al piano, esta colaboración se suma a la historia con un programa extremadamente romántico.
«Una llora y la otra ríe», explica Johannes Brahms mismo a propósito de sus dos más famosas oberturas. En contraste con la Obertura del festival académico, una suerte de fantasía orquestal, la Obertura Trágica interpretada en este programa está cargada de la profundidad artística más profunda del compositor en una forma sonata prodigiosamente lograda. La segunda parte del programa la ocupa el Burlesque para piano y orquesta de Richard Strauss, una pieza compuesta en un momento donde el compositor estaba en contacto muy cercano con Brahms. La pieza, relativamente corta, muestra ya las intenciones de Strauss por desarrollar una voz artística personal, apuntando especialmente a obras maestras posteriores como Das Rosenkavalier.