Este concierto se basa en un programa original que reúne tres piezas que remiten cada una a una mujer que marcó la vida de Scriabin, Liszt y Chopin: Natalya Sekerina, dedicataria de la Sonata-fantasía n.° 2 de Scriabin; la princesa ruso-polaca Carolyne de Sayn-Wittgenstein con quien Liszt compartió su vida durante la composición de su Sonata en si; y, por último, George Sand, amante de Chopin con quien el pianista polaco partió a la isla de Mallorca, donde compuso sus 24 Preludios. Para concluir este recital, Daniil Trifonov interpreta una de sus composiciones, Rachmaniana.
Daniil Trifonov, verdadera estrella ascendente del piano, recibió los elogios unánimes de la crítica internacional y de sus homólogos. Martha Argerich, en particular, lo considera un artista que «lo posee todo y más. Lo que hace con sus manos es técnicamente increíble. [...] Nunca he oído nada parecido».
Fotografía: © Nicolas Brodard.