A los diecisiete años, Irina Chistyakova reflexiona sobre los diez últimos años transcurridos dando conciertos en todo el mundo. Es la más joven de los cuatro protagonistas de la película Russia's Wonder Children, rodada en 2000. Hoy se enfrenta a lo que la mayoría de los niños prodigio sienten: mientras que en el pasado eran capaces de deslumbrar al público con su apariencia de niños, escondiendo un talento precoz, una vez adultos, solo cuenta las interpretaciones perfectamente logradas. Esta es la razón por la que algunos de ellos se han convertido en animales de competición en el mundo despiadado de la industria musical. Todos quieren conocer una gloria situada en la cima del Olimpo de los pianistas; solo un pequeño número de virtuosos lo consigue.
Esta película cuenta la historia del éxito y su cara oculta en el mundo de la música clásica. Siguiendo de cerca las experiencias de los cuatro protagonistas, con flashbacks de la película Russia's Wonder Children, Competitors, Los niños prodigio de Rusia podría parecer un estudio poético sobre el impacto emocional que puede tener la competencia más feroz en los jóvenes talentos.
Festival de Verbier 2012
Orquesta Sinfónica del Teatro Mariinski — Integ...