Para la década de 1960, Thelonious Monk, el pianista y compositor estadounidense detrás de docenas de standards de jazz, finalmente se había hecho un nombre dentro del panorama internacional, luego de varias décadas de trabajo duro en la escena musical de Nueva York, donde su música «difícil» recibía poco reconocimiento popular, a pesar de los importantes elogios de la crítica. Aquí acompañado por Charlie Rouse (saxofón), Larry Gales (bajo) y Ben Riley (percusión) para una sesión en vivo en la Maison de la Culture en Amiens, deleita Monk al público con varias de sus canciones icónicas, incluida «Blue Monk», posiblemente su composición más grabada, y «Crepuscule with Nelly», una pieza histórica compuesta sin improvisación, que el biógrafo de Monk, Robin Kelley, ha descrito como una canción de amor para su esposa Nellie y esencialmente «un concierto, si se quiere... escrito muy, muy cuidadosamente y muy deliberadamente, en el cual realmente se esforzó por que sonara como suena».