La primera ópera representada en Francia vuelve al escenario francés casi cuatro siglos después: ¡La finta pazza de Francesco Sacrati ilumina la magnífica Capilla Real de Versalles!
Aunque la ópera se representó por primera vez en Venecia en 1641, su historia en Francia comienza en 1645, cuando el cardenal Mazarino invitó a una compañía italiana para ofrecer la obra a Luis XIV, de entonces siete años. El éxito fue inmediato, gracias en parte a sus espectaculares secuencias de ballet que involucraban loros, avestruces y osos en escena. Luego, la ópera se olvidó y, tres siglos después, en 1983, el descubrimiento de una única partitura despertó el interés del público por su frescura musical y similitudes con L'incoronazione di Poppea de Monteverdi.
Basada en un episodio apócrifo de la Guerra de Troya conocido como Aquiles en Esciros, la trama es un ejemplo típico de la ópera barroca italiana conocida como opera seria: Aquiles (Filippo Mineccia), deseando evitar la guerra, se esconde con su amante Deidamia (Mariana Flores), disfrazada de princesa. La pareja ve interrumpido su idilio hasta el momento en que Ulises y Diomedes (Gabriel Jublin y Valerio Contaldo, respectivamente) llegan y exigen que Aquiles se una al ejército griegas, lo que termina por enloquecer a Deidamia (la primera «escena de locura» de la que se tenga en la ópera registro...).
Con el travestismo típico de la ópera de la era barroca, esta puesta en escena «metateatral» de La finta pazza firmada por Jean-Yves Ruf sorprende por su modernidad. ¡Leonardo García Alarcón vuelca su conocimiento y dinamismo sobre una obra por mucho tiempo olvidada que hay que conocer!
Fotografía © Gilles Abegg