Abre el programa la Sinfonía n.° 34 de Joseph Haydn, compositor clásico de quien toma la sala su nombre. Se trata de una obra orquestal de impecable factura en su forma que, no obstante, evoca el movimiento artístico conocido como «Sturm und Drang» (en español: «Tormenta e ímpetu»). Enseguida, Dénes Várjon y Veronika Eberle interpretan el Concierto para violín y piano de Hummel: pupilo de Mozart y rival de Beethoven pero, por mérito propio, uno de los compositores más importantes del pre-romanticismo. El programa da un giro inesperado al siglo XX para el sorprendente Concertino para piano, dos violines, viola, clarinete, corno y fagot de Janáček, una partitura de notable modernidad cargada no obstante de naturalidad. Este increíble grupo de virtuosos cierra el programa con una obra plenamente romántica: el Concierto para violín, piano y cuerdas de Mendelssohn, donde nobleza, pasión y brillante virtuosismo se encuentran para un momento exquisito de «música de cámara orquestal».