El Coro Bach de Maguncia y el Arpa festante de Múnich, bajo la dirección de Ralf Otto, rinden homenaje a Wilhelm Friedemann Bach interpretando por primera vez cuatro de sus cantatas. Un concierto grabado en la Iglesia de los Agustinos de Maguncia.
Con motivo del tricentenario del nacimiento de Wilhelm Friedemann Bach, y acompañados por cuatro solistas, el Coro Bach de Maguncia y el Arpa festante de Múnich (orquesta de cámara especializada en el repertorio barroco) ofrecen un redescubrimiento de cuatro magníficas cantatas y una sinfonía de Wilhelm Friedemann Bach, compositor poco conocido que es, sin embargo, uno de los hijos más dotados de Juan Sebastián Bach.
Este «enfant terrible», que pronto reveló su enorme talento, siguió una carrera de organista y compositor a la sombra de su padre. Conocido como el «Bach de Halle» al convertirse en Director de la Música y Organista de la Iglesia de Halle, Wilhelm Friedemann Bach optó por apartarse de la pertenencia a una gran institución para desarrollar su carrera abandonando este puesto en 1764. A pesar de la miseria en la que vivió como consecuencia de esta elección, dejó para la posteridad una obra brillante, con una gran aportación, en particular, al género de la cantata de iglesia.
Los intérpretes ofrecen una magnífica reconstitución de cuatro de sus cantatas «espirituales» compuestas en la década de 1750, dirigidos por un gran conocedor del repertorio, ya que Ralf Otto es reconocido por haber redescubierto varias veces compositores barrocos olvidados. Un magnífico concierto acompañado de instrumentos de época del Arpa festante en el coro de la Iglesia de San Agustín de Maguncia decorada al estilo rococo.