Dos piezas de las célebres Sonatas y Partitas para violín solo Bach ha sido las elegidas para esta master class. La Partita n.° 2 en re menor, BWV 1004, en cinco movimientos, es famosa en particular por su final, la Chacona. Muy larga, de una variedad y riqueza extraordinarias, requiere a la vez una gran sensibilidad musical y un verdadero virtuosismo. Es, pues, una pieza capital del repertorio para violín solo de la época, al igual que la Partita n.° 3 en mi mayor, BWV 1006, sin duda la más conocida de las seis suites que componen esta obra. Su preludio, muy rápido y técnico, el más interpretado, así como la célebre Gavota se interpretan frecuentemente por separado y figuran en numerosas recopilaciones de música clásica.

Compuestas en el mismo periodo, entre 1717 y 1723, las Seis suites para violonchelo solo también forman parte del programa con la Suite para violonchelo n.° 3 en do mayor, BWV 1009 y la Suite para violonchelo n.° 5 en do menor, BWV 1011. Consideradas como piezas ineludibles del repertorio de este instrumento, han sido interpretadas por todos los grandes violonchelistas. Con una dificultad técnica moderada, se valoran por su calidad musical, sin duda, pero también por su interés pedagógico, ya que Bach pone de relieve todas las capacidades polifónicas del instrumento.