La ópera Carmen de Bizet contiene algunas de las melodías más conocidas universalmente en la historia de la música: desde su electrizante obertura, la inmortal 'Habanera', la coqueta 'Seguidilla' y su hipnótica «Canción gitana». Y si la música, sorprendente en su momento, sigue encantando al público el día de hoy, esto se debe también a la pasión con que directores, orquestas y solistas vocales se siguen acercando a ella... ¡Como ocurre exactamente en esta impecable producción de 2009 para La Scala de Milán!
Con tan solo 25 años en aquel momento, Anita Rachvelishvili hace su debut en el legendario teatro italiano, siendo la cantante más joven en abrir una temporada. The New York Times describe la voz de la mezzosoprano georgiana «como terciopelo, ágil [...] natural, de un lirismo sin esfuerzo» y, como un subyugado Don José, dice de Jonas Kaufmann: «supremo, conmovedor», un cantante «de un gusto exquisito y absoluto control». Erwin Schrott como Escamillo y Adriana Damato como Micaëla completan un elenco estelar dirigido por el inmenso Daniel Barenboim al frente de la celebrada orquesta de La Scala, quien ofrece una lectura irreprochable e irresistible de este gran favorito operístico inmortal.