Las Cinco piezas para orquesta de Schoenberg comentadas a profundidad por el director de orquesta Michael Gielen.

«Ausencia de arquitectura, ausencia de construcción, solo un flujo ininterrumpido de colores, ritmos y humores», así describe Arnold Schoenberg sus Cinco piezas para orquesta, escritas en 1909. Ensayando la obra con la Orquesta Filarmónica de la Radio Holandesa, el director de orquesta Michael Gielen, gran especialista de este repertorio, explora con el pianista y musicólogo Charles Rosen los diversos estratos de la obra.

Rosen, por su parte, compara las Cinco piezas para orquesta con las pinturas de los Secesionistas de Viena y de Gustav Klimt, cuya obra El beso nos muestra capacidades idénticas para provocar una fuerte emoción a través de breves fragmentos. Al final, Rosen interpreta el último movimiento de las Tres piezas para piano de Schoenberg, antes de que Michael Gielen dirija las Piezas para orquesta en su totalidad.