Venecia y Giuseppe Verdi: la ciudad en la que famosas óperas como Rigoletto y la Traviata vieron el día. También pasó por allí el gran compositor italiano, cuyo bicentenario se celebra este año.
El director de orquesta británico John Eliot Gardiner se declara particularmente sensible a la música de Verdi: “Creo que la progresión que han tomado sus obras maestras estos últimos años es bastante impresionante. Son fantásticas ya que no solo son cautivadoras y reales sino también melódicas y armoniosas. Pasan tantas cosas interesantes… Y Verdi, como compositor, está aún subestimado.
Era un ‘contadino’, un hombre de campo. No solo vivía en una especia de estratosfera, en su propia atmósfera, hay algo muy terrestre en Verdi que me encanta. Esto no quiere decir que no pudiese expresar sus emociones de una manera muy tierna y sutil.
Yo creo que fue un gran hombre con el que te podías sentar y compartir una botella de vino, un poco de parmesano, jamón de parma y tener una buena charla con aquel gran caracter, esa gran persona.. ¡Tan humana!”
Por supuesto, las óperas de Verdi no faltaron durante el concierto de año nuevo en La Fenice. El joven tenor Saimir Pirgu explica qué se siente sobre el escenario: “Ser tenor te da alas… Crees que todo el mundo te está mirando… En realidad somos como payasos: divertimos al público durante dos horas, a veces solo un minuto… Al final del espectáculo, todo el mundo vuelve a casa, ya no existes, y vuelves a tu vida real.”
Para la soprano Desirée Rancatore, estar en Venecia añade una nueva dimensión a la música: “Me encanta perderme en Venecia. Perderme en esta ciudad es una experiencia increible, cada rincón tiene algo mágico e histórico. Te olvidas de quién eres y de dónde estás.
Cantar es mi vida. Producir sonidos con mi voz, dar vida a personajes únicos como aquellos de las óperas, hace que mi vida sea maravillosa. Creo que cada nota que canto delante del público hace que todo sacrificio, todos esos momentos de soledad, valgan la pena.”
En este reportaje, se pueden escuchar varios fragmentos de las obras de Giuseppe Verdi:
- Aida: Sinfonia
- I vespri siciliani: « Mercé, dilette amiche »
- Rigoletto: « Questa o quella per me pari sono »
- La Traviata: « Sempre libera degg’io » y « Libiam ne’ lieti calici »